Convierte tu hogar en un espacio ecológico y sostenible
A nivel individual, las decisiones que tomamos en nuestra vida cotidiana tienen un impacto significativo en el medio ambiente.
Actividades como conducir un coche de gasolina, comer carne, consumir demasiada electricidad, etc., contribuyen a las emisiones de carbono a la atmósfera, lo que se conoce como nuestra huella de carbono. Estas emisiones provocan el cambio climático y otros daños medioambientales.
Pero hay cambios sencillos en nuestro estilo de vida que cada uno de nosotros puede hacer para reducir la huella de carbono en casa.
¿Qué es la huella de carbono?
La huella de carbono es la cantidad de gases de efecto invernadero (GEI) liberados a la atmósfera por diversas actividades humanas.
Es el resultado de las emisiones de carbono que provienen del uso, producción y proceso final de un producto o servicio.
Los GEI incluyen (80%) el dióxido de carbono (emitido principalmente por los seres humanos) y otros gases (20%), como el metano, el óxido nitroso y los gases fluorados.
Estos gases de efecto invernadero atrapan el calor en la atmósfera, provocando el calentamiento global.
¿Cómo se calcula la huella de carbono?
El cálculo de la huella de carbono te ayudará a determinar cuánto carbono estás emitiendo a la atmósfera. Este cálculo se basa en las actividades diarias que contribuyen a la emisión de gases de efecto invernadero, por ejemplo:
- La cantidad de combustible que necesitan las centrales eléctricas para generar electricidad para tu hogar (según el tipo de combustible y la cantidad que utilices).
- La cantidad de emisiones de carbono derivadas del uso de bicicletas o coches (dependiendo de la eficiencia del combustible y de la cantidad que utilices).
- La cantidad de emisiones de GEI de las calderas y calentadores (en función de la eficiencia, el tamaño, el tiempo y el combustible utilizado).
- La cantidad de residuos que hay que eliminar.
Ahora que entendemos mejor qué es la huella de carbono y cómo calcularla, veamos formas sencillas de reducir tu huella de carbono en casa.
¿Cómo puedes reducir tu huella de carbono en casa?
China es el mayor emisor de huella de carbono, seguido de Estados Unidos con 5.410 millones de toneladas de emisiones de carbono.
Con una tasa tan alta de emisiones de carbono, el cambio climático se ha convertido en una amenaza inabordable para el ecosistema.
Sin embargo, tomando las medidas adecuadas y realizando cambios básicos en nuestros hogares, podemos promover un medio ambiente sostenible:
Realiza una auditoría energética de tu hogar
Una de las formas más sencillas de empezar a reducir la huella de carbono en casa es realizar una auditoría energética.
Muchas compañías eléctricas ofrecen este servicio por un módico precio, ¡o incluso gratis!
Una auditoría energética profesional es el primer paso para descubrir qué zonas de tu casa están causando problemas de desperdicio de energía y es probable que un auditor energético te haga muchas de las recomendaciones que hemos enumerado en esta guía.
Usa la calefacción y el aire acondicionado de forma más responsable
A medida que el clima sigue cambiando, se prevé que la dependencia mundial de los sistemas de aire acondicionado se triplique de aquí a 2050.
Esto es preocupante para el calentamiento global, ya que la calefacción y el aire acondicionado necesitan mucha electricidad para funcionar eficientemente, que procede de combustibles fósiles.
Los sistemas de aire acondicionado también liberan a la atmósfera muchos gases de efecto invernadero llamado hidrofluorocarbono, que tiene una capacidad para atrapar calor mucho mayor que el dióxido de carbono.
Reevaluando la forma en que utiliza este equipo en tu hogar, no sólo puedes reducir tu huella de carbono, sino también ahorrar dinero en tu factura energética.
He aquí algunos consejos para conseguirlo:
Baja la calefacción
Bajando la calefacción sólo 1ºC, puedes ahorrar hasta 300 kg de emisiones de dióxido de carbono al año y entre un 5% y un 10% en la factura de la luz.
Utiliza ventiladores en lugar de aire acondicionado siempre que sea posible.
Un ventilador requiere mucha menos energía para funcionar de forma eficiente que un aire acondicionado.
Por lo demás, utiliza los ajustes de ahorro de energía del aire acondicionado o utilízalo con moderación. Si puedes permitírtelo, invierte en aislamiento.
Un aislamiento adecuado puede ayudar a mantener el aire caliente dentro de la casa durante los meses más fríos y el aire caliente fuera durante los meses más cálidos. Esto puede reducir significativamente tu dependencia de los sistemas de calefacción y refrigeración.
Considera la posibilidad de sustituir los equipos antiguos. Si tu aire acondicionado o calefacción tiene más de 20 años, es probable que sea mucho menos eficiente energéticamente que los modelos actuales.
Vídeo: 6 ideas para reducir tu huella de carbono
¿Sabías que cambios en tu rutina diaria pueden contribuir a reducir tu huella ecológica? Pequeñas acciones y cambios de hábitos pueden ayudar a combatir el cambio climático.
Por eso anímate a conocer y a seguir estos simples consejos para generar grandes cambios:
Cambia a un nuevo sistema de calefacción
Una vez que le hayas cogido el truco, puedes plantearte un sistema de calefacción que no utilice combustibles fósiles para ayudarte a reducir aún más sus emisiones.
Las bombas de calor eléctricas eficientes y los sistemas avanzados de combustión de leña pueden mantenerte caliente todo el invierno, ahorrarte dinero en tus facturas de calefacción y ayudarte a reducir sus emisiones.
Instala bombillas de bajo consumo
Sustituye tus bombillas incandescentes por LED más eficientes, que ahora existen en todas las formas y tamaños.
Los LED consumen una cuarta parte de energía que las bombillas incandescentes y duran 20 veces más.
No sólo reducirás las emisiones de gases de efecto invernadero, sino que también ahorrarás dinero en la factura de la luz y en bombillas.
Utiliza enchufes inteligentes conectados
Si en tu casa todavía hay un interruptor para cada enchufe, aquí tienes un sencillo cambio que puedes hacer en casa para no sólo reducir tu huella de carbono, sino también tus facturas de la luz cada mes.
Cuando utilizamos interruptores para controlar nuestros enchufes, a menudo nos olvidamos de apagarlos, lo que consume energía y encarece las facturas.
Cuando los aparatos electrónicos están enchufados a la toma de corriente, consumen una pequeña cantidad de energía, lo que aumenta tu huella de carbono.
Puedes evitarlo instalando un enchufe inteligente. Con Bluetooth y Wi-Fi, es fácil de usar y tiene una única toma de encendido/apagado para varios dispositivos.
Utilizar un enchufe inteligente te evitará tener que desenchufar cada aparato individualmente. Este sistema también se puede gestionar desde el smartphone con una aplicación específica.
Reducir, reutilizar y reciclar
Reciclar reduce la necesidad de materias primas, ahorra energía y combustibles fósiles y desvía materiales de vertederos e incineradoras.
Esto es lo que puede hacer para reducir sus residuos domésticos y poner en práctica las tres “R”:
- Reduce: Compra sólo lo que necesites, elige productos con menos envases, busca artículos que puedas reutilizar y compra a granel.
- Reutiliza: Compra bolsas de la compra reutilizables, usa una botella de agua rellenable, dona los aparatos electrónicos que ya no uses, dona ropa, muebles y enseres domésticos, reutiliza los recipientes para las sobras.
- Recicla: Separa los residuos de los artículos que puedan reciclarse. Esto incluye papel, vidrio, cartón, aluminio y baterías de plomo.
Reciclar no es sólo depositar un producto en el contenedor adecuado. Se trata de comprender el valor de las materias primas, la energía y los recursos que se han empleado para crear el artículo.
El reciclaje reutiliza los recursos, ahorra energía y reduce el impacto global sobre el planeta.
